«Los riesgos de desinformación están contribuyendo a tomar conciencia de la necesidad de que nos comprometamos como sociedad con empresas periodísticas que garanticen el propósito de veracidad, que no está reñida con la consecución de una línea editorial, pero que alberga una clara separación entre información y opinión, y sirve de contrapeso de poder, no de correa de transmisión. Esa es la voluntad que inspiró al legislador a aprobar la Ley Europea de Libertad de Medios»
Artículo publicado por ABC